
La integración es un proceso que posibilita a las
personas la participación activa dentro de un grupo o
de una sociedad. Supone la aceptación por parte de los
miembros de ese grupo de más personas. Las personas
son diferentes entre sí. Pero en nuestro interior
todos somos iguales. Esto hace posible que personas
distintas puedan encontrar lazos mediante los que
integrarse en un grupo. La integración es necesaria
porque no siempre vemos a los demás como iguales.
Tenemos prejuicios hacia los que no son como nosotros
por diferentes motivos: las personas con discapacidad,
las que son de diferente sexo, las que vienen de otro
país, las que tienen un color de piel distinto, otra
cultura...
Pero la diversidad es buena. Nos enriquecernos con lo
que otros son y piensan. Debemos ser capaces de
integrar a todas las personas. El deporte es
herramienta de integración. Hace que personas muy
distintas (con necesidades educativas especiales o no,
hombres o mujeres, blancas, negras, amarillas o
mestizas, de una cultura o religión u otra) puedan
interactuar dentro del juego, superarse en la
competición, respetar a los demás y también ser
respetados. Las personas con discapacidad, las
mujeres, las distintas razas, culturas, religiones,
los diferentes pensamientos tienen su sitio en el
deporte, centro de acercamiento e integración.
La participación es un derecho que todos debemos
tener y es la herramienta básica para la integración
social. Participar es tomar parte en las actividades
de otros y hacerlas nuestras. La participación es
compartir cosas, es aportar tu granito de arena a algo
más grande, a algo que se construye entre muchos.
Participar conlleva respetar a los demás, aceptarlos
tal como son y que ellos te acepten también a ti.
La participación en el deporte en saludable y
necesaria. Cada vez más personas hacemos deporte y eso
nos une, porque la actividad física tiene tantas cosas
que compartir que es el escenario idóneo para la
participación. Colectivos que no participan en otros
ámbitos, lo hacen en el deporte.